The Cool Web
Children are dumb to say how hot the day is,
How hot the scent is of the summer rose,
How dreadful the black wastes of evening sky,
How dreadful the tall soldiers drumming by,
But we have speech, to chill the angry day,
And speech, to dull the rose's cruel scent,
We spell away the overhanging night,
We spell away the soldiers and the fright.
There's a cool web of language winds us in,
Retreat from too much joy or too much fear:
We grow sea-green at last and coldly die
In brininess and volubility.
But if we let our tongues lose self-possession,
Throwing off language and its watery clasp
Before our death, instead of when death comes,
Facing the wide glare of the children's day,
Facing the rose, the dark sky and the drums,
We shall go mad, no doubt, and die that way.
La Fría Tela de Araña
Los niños son mudos para decir cómo de cálido es el dia,
Cómo de cálido es el olor de la rosa de verano,
Cómo de terribles los desechos negros del cielo de la tarde,
Cómo de terrible el tambor de los soldados,
Pero tenemos el discurso, enfriar el día enfadado,
Y otro discurso, apagar el olor cruel de la rosa,
Conjuramos la noche que sobresale,
Conjuramos a los soldados y el miedo.
Hay una fría tela de araña de lengua que nos enrolla,
Que se retira de la alegría o del miedo excesivos:
Por fin crecemos verdemares y con frialdad morimos
En salobre locuacidad.
Pero si dejamos a nuestras lenguas perder su autodominio,
Deshaciéndonos de la lengua y de su broche acuoso
Antes de nuestra muerte, en vez de cuando la muerte llega,
Encarando el amplio fulgor del día de los niños,
Encarando a la rosa, al cielo oscuro y a los tambores,
Nos volveremos locos, sin duda, y así moriremos.
© Traducción de ANTONIO LINARES FAMILIAR