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| AGUSTÍN GARCÍA CALVO 1926 - 2012 le recuerdo entrando por la cafetería de la Facultad de Filología |
¡Cuántas cosas...!
¡Cuántas cosas tendría que deciros,
si supiera quién hay tras de la puerta,
si pudiera contar lo que despierta
cada vez que se duermen mis sentidos!
Pero ya no me queda entre los giros
de los pasillos de esta vida muerta,
más que un polvillo de memoria incierta,
que no sé si en un soplo transmitiros.
Puede que alguno de vosotros sienta,
al oír lo que digo, que esa cuenta
ya la ha oído él sonar antaño.
Y tal es verdad. Yo aquí en la boca
siento que lo más mío me es extraño
y que en mí la razón se vuelve loca.
Gracias Antonio por tu soneto a Agustín. Lo llamo así, aunque nunca lo conocí personalmente pero llevo treinta años leyéndolo y siguiéndolo de cerca en sus publicaciones, conferencias y tertulias del Ateneo. Hace unos cinco años vino a Lérida con Isabel y estuvo como en sus escritos lúcido, honesto, sin concesiones a nada ni a nadie. Fue un gusto sentirlo y ver esa vejez tan florida que tuvo. Como tú yo también: "...siento que lo más mío me es extraño
ResponderEliminary que en mí la razón se vuelve loca." Gracias de nuevo. Un saludo.